Para que no hable mi boca las obras de los hombres(c); por las palabras de tus labios, yo he guardado caminos duros.
1 Juan 4:5 - Biblia Jünemann Septuaginta en español Ellos del mundo son; por esto del mundo hablan, y el mundo les oye. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Ellos son del mundo; por eso hablan del mundo, y el mundo los oye. Biblia Nueva Traducción Viviente Esas personas pertenecen a este mundo, por eso hablan desde el punto de vista del mundo, y el mundo les presta atención. Biblia Católica (Latinoamericana) Ellos son del mundo, por eso su lenguaje es el del mundo, y el mundo los escucha. La Biblia Textual 3a Edicion Ellos proceden del mundo, por eso hablan de parte del mundo, y el mundo los escucha. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ellos son del mundo. Por eso hablan según el mundo, y el mundo les oye. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Ellos son del mundo; por eso hablan del mundo, y el mundo los oye. |
Para que no hable mi boca las obras de los hombres(c); por las palabras de tus labios, yo he guardado caminos duros.
Porque así dijo el Señor: «No os engañen los pseudoprofetas, los que hay en vosotros, y no os engañen vuestros adivinos; y no oigáis a vuestros sueños que vos soñáis;
Los profetas profetizan cosas injustas; y los sacerdotes palmotean con sus manos; y mi pueblo amó así; y ¿qué haréis después de esto?
habéis andado perseguidos, nadie persiguiendo; el espíritu ha estatuido mentira; te destiló en vino y ebriedad(g). Y será de la gota de este pueblo,
Y alabó el señor al administrador de la iniquidad, porque prudentemente obró, porque los hijos de este siglo más prudentes sobre(c) los hijos de la luz para su generación(d) son».
Yo les he dado tu palabra; y el mundo les ha aborrecido porque no son del mundo; así como yo no soy del mundo.
El que de arriba viene, por sobre todos está. El que es de la tierra, de la tierra es, y de la tierra habla; el que del cielo viene, por sobre todos está;
Y decíales: «Vosotros de lo de abajo sois; yo de lo de arriba soy; vosotros de este mundo sois; yo no soy de este mundo.
Pues habrá tiempo, cuando la santa doctrina no tolerarán; sino que, según los propios apetitos, se hacinarán maestros, picándoseles(a) el oído;
Y fue arrojado el dragón, el grande, la serpiente la antigua, el que se llama Diablo y satanás; el que seduce al orbe entero; arrojado fue a la tierra; y sus ángeles con él arrojados fueron.