Él fue quien suprimió los lugares altos, rompió las estelas, taló los aserás y destrozó la serpiente de bronce que hab a fabricado Moisés, porque hasta aquellos d as los israelitas quemaban incienso ante ella. La llamaban Nejustán.
Números 21:9 - Biblia Castilian 2003 Hizo, pues, Moisés una serpiente de bronce y la colocó sobre un asta; y si una serpiente mord a a uno, éste miraba a la serpiente de bronce y se curaba. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y Moisés hizo una serpiente de bronce, y la puso sobre un asta; y cuando alguna serpiente mordía a alguno, miraba a la serpiente de bronce, y vivía. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que Moisés hizo una serpiente de bronce y la ató a un poste. ¡Entonces los que eran mordidos por una serpiente miraban la serpiente de bronce y sanaban! Biblia Católica (Latinoamericana) Moisés hizo una serpiente de bronce y la puso en un poste. Cuando alguien era mordido por una serpiente, miraba la serpiente de bronce y se sanaba. La Biblia Textual 3a Edicion Y Moisés hizo una serpiente de bronce y la puso sobre el asta,° y sucedía que cuando una serpiente mordía a un hombre, y éste dirigía su mirada hacia la serpiente de bronce, vivía. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Hizo, pues, Moisés una serpiente de bronce y la colocó sobre un asta; y si una serpiente mordía a uno, éste miraba a la serpiente de bronce y se curaba. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Moisés hizo una serpiente de bronce y la puso sobre un asta; y sucedía que cuando una serpiente mordía a alguno, si este miraba a la serpiente de bronce, vivía. |
Él fue quien suprimió los lugares altos, rompió las estelas, taló los aserás y destrozó la serpiente de bronce que hab a fabricado Moisés, porque hasta aquellos d as los israelitas quemaban incienso ante ella. La llamaban Nejustán.
Volved a m y seréis salvos, confines todos de la tierra; que yo soy Dios y no hay otro.
'Pero sobre la casa de David y sobre los habitantes de Jerusalén derramaré un esp ritu de gracia y de oración, y mirarán a aquel a quien ellos mismos traspasaron. Harán duelo por él como se hace duelo por el hijo único y llorarán amargamente por él como se llora amargamente por el primogénito.
Al d a siguiente, Juan ve a Jesús que viene hacia él, y entonces dice: 'Éste es el Cordero de Dios, el que quita el pecado del mundo.
Porque ésta es la voluntad de mi Padre: que todo el que ve al Hijo y cree en él tenga vida eterna, y que yo lo resucite en el último d a'.
En el evangelio se revela, en efecto, la justicia de Dios que, partiendo de la de fe, en la fe se consuma, según está escrito: el justo por fe vivirá.
En efecto, lo que era imposible a la ley, por cuanto que estaba incapacitada por causa de la carne, Dios, enviando a su propio Hijo en carne semejante a la del pecado y como v ctima por el pecado, condenó al pecado en la carne,
Al que no conoció pecado, lo hizo pecado por nosotros, para que en él llegáramos nosotros a ser justicia de Dios.
fija nuestra mirada en el jefe iniciador y consumador de la fe: Jesús. El cual, a la vista de la dicha que se le presentaba, soportó la cruz, sin tomar en cuenta la ignominia, y está sentado a la diestra del trono de Dios.
El que comete pecado del diablo es, porque el diablo peca desde el principio. Para esto se manifestó el Hijo de Dios: para destruir las obras del diablo.