Al pasar por el valle de los bálsamos, lo tornan manantial, y la lluvia primera lo viste de sus dádivas.
Juan 1:16 - Biblia Castilian 2003 Pues de su plenitud todos nosotros hemos recibido: gracia por gracia. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia. Biblia Nueva Traducción Viviente De su abundancia, todos hemos recibido una bendición inmerecida tras otra. Biblia Católica (Latinoamericana) De su plenitud hemos recibido todos,
y cada don amoroso preparaba otro. La Biblia Textual 3a Edicion Porque de su plenitud tomamos todos; es decir, gracia por° gracia, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pues de su plenitud todos nosotros hemos recibido: gracia por gracia. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y de su plenitud tomamos todos, y gracia por gracia. |
Al pasar por el valle de los bálsamos, lo tornan manantial, y la lluvia primera lo viste de sus dádivas.
¿Quién eres tú, gran monta a? ¡Seas llanura ante Zorobabel! Él sacará la piedra del remate entre las aclamaciones de: ¡muy bien, muy bien!'.
Porque al que tiene, se le dará y tendrá de sobra; pero al que no tiene, aun aquello que tiene se le quitará.
' Yo os bautizo con agua como se al de conversión. Pero el que viene detrás de m es más poderoso que yo, y ni siquiera soy digno de llevarle las sandalias; él os bautizará con Esp ritu Santo y fuego.
Juan quer a imped rselo, diciendo: 'Soy yo quien deber a ser bautizado por ti, ¿y tú vienes a m ?'.
porque yo os daré un lenguaje y una sabidur a que no podrán resistir ni contradecir ninguno de vuestros adversarios.
Porque aquel a quien Dios envió habla las palabras de Dios; pues no da el Esp ritu con cicater a.
Porque si por la falta de uno solo y por mediación de este solo reinó la muerte en el mundo, con mucha más razón, por medio de uno solo, Jesucristo, reinarán en la vida los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia.
mediante el cual hemos obtenido [por la fe] incluso el acceso a esta gracia, en la que nos mantenemos firmes, nos sentimos gozosamente seguros en la esperanza de la gloria de Dios.
La ley intervino para que se multiplicaran las faltas; pero, donde se multiplicó el pecado, mucho más sobreabundó la gracia,
Pero vosotros no viv s según la carne, sino según el esp ritu, puesto que el Esp ritu de Dios habita en vosotros. Si alguno no tiene el Esp ritu de Cristo, este tal no pertenece a Cristo.
y conocer el amor de Cristo, que excede todo conocimiento, para que quedéis llenos de la plenitud total de Dios.
en quien se encuentran, escondidos, todos los tesoros de la sabidur a y del conocimiento.
Ellos investigaban a qué tiempo y a qué circunstancias se refer a el esp ritu de Cristo que estaba en ellos y que testificaba de antemano los padecimientos reservados a Cristo y las glorias que los seguir an.
santificados por el Esp ritu, según el previo designio de Dios Padre, para recibir el mensaje de Jesucristo y la aspersión de su sangre: que abunden en vosotros la gracia y la paz.