El hongo, llamado Candida auris, es una forma dañina de levadura. Los científicos dicen que puede ser difícil de identificarlo con pruebas de laboratorio estándar. Funcionarios federales de salud hicieron sonar las alarmas en 2016 debido a que dos de tres tipos de fármacos de uso común contra hongos tuvieron poco efecto.
«Está actuando como una superbacteria«, dijo la doctora Paige Armstrong de CDC. Las personas más vulnerables son pacientes frágiles hospitalizados, en particular los recién nacidos y los ancianos. El hongo tiene a ser diagnosticado en pacientes después de que han estado hospitalizados varias semanas. El hongo puede infectar heridas, oídos y el torrente sanguíneo.
El estudio presentado esta semana en una conferencia de los CDC detalló el viaje de investigadores a Suramérica para ayudar a indagar una epidemia en tres ciudades de Colombia. Encontraron el hongo sobre superficies en habitaciones de hospital y sobre la piel de enfermeras y pacientes, incluso después de que los pacientes fueron tratados con medicamentos antifúngicos.
«El organismo puede pasar de paciente a paciente», alertó a la cadena CBS el doctor Neil Gaffin, especialista en enfermedades infecciosas del Hospital Valley, en Nueva Jersey.
Diecisiete pacientes de Nueva York murieron, pero funcionarios estatales señalaron que todas las personas infectadas tenían otras enfermedades y que el hongo no fue necesariamente la causa de fallecimiento.