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A pesar de los riesgos, decenas de misioneros están actuando como profesores en la Universidad de Ciencia y Tecnología en Pyongyang, Corea del Norte.
Kim Hak Song fue recientemente detenido por las autoridades de Corea del Norte, pero optó por continuar la enseñanza en la institución educativa.
«Me he comprometido a dedicar mi última gota de sangre para este trabajo», dijo, según Reuters.
De la Fundación coreana Kim James, la Universidad de Pyongyang cuenta con 500 estudiantes de grado y 60 de posgrado.
De acuerdo con Chan-mo Parque Canciller, a pesar de los graves riesgos para los misioneros y funcionarios estadounidenses, alrededor de 60 personas cristianas cada semestre.
El gobierno de Corea del Norte detuvo a cuatro ciudadanos estadounidenses bajo diversos cargos, principalmente con el argumento de ofrecer amenaza para la seguridad nacional.
La Universidad de Pyongyang explicó que la detención de sus profesores no fue patrocinado por la escuela.
Sin embargo, mientras que la Universidad no oculta su filiación cristiana, ex maestros dijeron que la escuela no quiere dar la impresión de que está haciendo el trabajo misionero.
Abraham Kim, director de la Universidad Bible Fellowship en Chicago, dijo que aunque los voluntarios «no pueden predicar directamente la palabra de Dios, podemos influir indirectamente en las personas sólo por ser buenos cristianos.»
Curiosamente, no todos los profesores son religiosos. Will Scott, que era profesor de ingeniería de software en la Universidad de Pyongyang entre 2013 y 2015, dijo que es un ateo.
«Los extranjeros cristianos asisten a sus reuniones los domingos, pero no dejaron de hablar de ello en el aula», dijo Scott.
