Doce niños y un entrenado de fútbol fueron atrapados en una cueva en la provincia de Chiang Rai, Tailandia. Pasaron 18 días atrapados y solo la oración ante Dios pudo recatarlos.
Esta historia fue muy conmovedora en el país y resonó en todo el mundo. Al comentar sobre el caso, Adun de 14 años, uno de los muchachos atrapados, recordó la oración que hizo el décimo día, cuando él y sus amigos ya estaban desesperados.
«No pudimos hacer nada para ayudar. Lo único que podía hacer era orar. Oré: ‘Señor, solo soy un niño. Tú eres el Dios todopoderoso, eres santo y eres poderoso. Ahora no puedo hacer nada, ven y ayúdanos », recordó.
El rescate tuvo lugar el 5 de julio. El adolescente entendió que fue Dios quien lo ayudó en ese momento y permitió que todos salieran vivos de esa situación.
«Oré intensamente, y Dios me respondió con su ayuda. Fuimos yo y Dios juntos enfrentando esta situación, y le agradezco que me haya ayudado a salir de la cueva«.