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Un pastor en Wuhan, China, lugar de origen del Covid-19, fue retirado por la policía el sábado durante un evento cristiano por Zoom; según un organismo de control de la persecución cristiana.
El predicador, identificado solo como Luo de la Iglesia Nanjing Road en la provincia de Hubei, «fue llevado por la policía por publicar el evangelio en línea»; según la Chinese Christian Fellowship of Righteousness en una publicación de Facebook.
International Christian Concern (ICC) dijo que la «Reunión de Proclamación del Evangelio de Jesús» en Zoom, era un evento de todo el día con una sesión matutina y otra vespertina; la policía apareció alrededor del mediodía para «buscar materiales de evangelización o publicaciones antes de llevarse a Luo».
La policía supuestamente interrogó al Pastor Luo en la comisaría durante cuatro horas y media.
«Nunca cambiaré mi persistencia sobre el evangelismo»
«Les reprendo, diciéndoles que no se preocupan de los asuntos que deberían preocuparse», dijo Luo. «Los cristianos ignoraron sus propias vidas para hacer cosas buenas, pero la policía los trata como a los malos, esto no es razonable».
«También les dije unas cuantas veces con toda seriedad, sólo viviré para Cristo, no discutiré sobre otros asuntos. Sin embargo, nunca cambiaré [mi persistencia] sobre el evangelismo».
Luo y su iglesia empezaron a repartir máscaras y folletos del evangelio en las calles de Wuhan cuando el virus se desató por primera vez; mucha gente ha sido receptiva y acogedora con ambos durante estos días difíciles.
Pastor Luo es considerado una «amenaza»
El reverendo Jonathan Liu, fundador de la Chinese Christian Fellowship of Righteousness, dijo a Fox News que el Partido Comunista Chino (PCC) considera a Luo como una «amenaza» porque «el gobierno exige que todos sean leales al PCC y a Xi Jinping».
«Desde que Xi Jinping llegó al poder, la persecución del cristianismo por parte del gobierno chino ha sido la norma. Han tejido varios crímenes para perseguir a las iglesias y a los pastores», añadió Liu.
A principios de este mes, aparecieron imágenes de vídeo de funcionarios haciendo redadas y arrastrando violentamente a los miembros a mitad de su servicio en la iglesia de Xingguang, en el sudeste de la provincia de Fujian.
A principios de este año, el director general de Open Doors USA, David Curry, advirtió que China, bajo el presidente Xi Jinping, estaba construyendo un «plan de persecución» ya que los cristianos han estado bajo constante vigilancia, no solo en las calles, sino también en sus iglesias, que han sido derribadas, y los libros sagrados confiscados.
